Cada vez que acudimos a un profesional para conseguir la solución a algún problema, siempre nos asalta la misma pregunta ¿Me engañara?
Esta pregunta nos asalta cuando recurrimos a un electricista, o fontanero desconocido, o el taller para reparar nuestro vehículo. Pero no se libran de esa sospecha otros profesionales de más alta cualificación. Y nos seguimos preguntando si ¿Me engañaran?, estos profesionales.
Para que estén bien informadas y acudan a los Centros de Medicina Estética con buena información, comenzaré por explicar algo que me atañe profesionalmente a mí y que son los tratamientos de Medicina Estética.
Ha habido dos descubrimientos importantísimos en la Medicina Estética que han nacido aproximadamente en la misma década sobre los años 80 del pasado siglo. El ácido retinoico y la radiofrecuencia Thermage.
Ácido retinoico
El ácido retinoico, que se descubrió como tantas otras cosas por pura casualidad, es el mejor agente rejuvenecedor. Produce una lisis intensa en la capa córnea de la piel que como respuesta el organismo desencadena todo un proceso de rejuvenecimiento.
El problema es que es fotosensible y muy delicado de manejar, por ello debe ser prescrito por un médico cualificado que controle todo el proceso. Pero su descubrimiento inauguró la etapa de los peelings y apareció el ácido glicólico menos efectivo pero no fotosensible y sin ningún problema posterior.
Luego estos ácidos se tamponaron quedando con un PH alto que bajaba su acidez sin perder su eficacia. Su uso se extendió a los Centros de Estética apareciendo nuevos ácidos que facilitaron a las esteticistas su trabajo de rejuvenecer la piel.
Por supuesto que estos ácidos no tienen la efectividad del ácido retinoico, pero tienen la ventaja de que su uso no puede producir ningún daño.
La cosmética a remolque de estos descubrimientos, ha avanzado tanto en los últimos tiempos, que las cremas de hoy en día son verdaderas joyas para la piel. Y son capaces de corregir cualquier imperfección.
Los buenos laboratorios, invierten mucho en investigación marcándose una gran diferencia con los laboratorios de “toda la vida“ que solo invierten en marketing promocionando la marca o el nombre. Por eso hay que dejarse asesorar por las profesionales de la estética que saben que conviene a cada piel. Debemos recordar que cada una de nosotros somos únicos y por tanto necesitamos cuidados adaptados a cada uno
Aunque no depende del descubrimiento del ácido retinoico, el Fraxel tiene la ventaja de ser un láser con dos longitudes de onda, y la 1970 produce un efecto semejante a la aplicación del ácido retinoico y solo son necesarias unas pocas sesiones.
Tratamiento Thermage
También en dicha década surgió en Estados Unidos una radiofrecuencia que en una sola sesión provoca:
- Una recuperación de la dermis
- Una lisis de la capa córnea de la epidermis
- Un estímulo de neoformación celular y de aumento del calibre vascular
Todo ello nos lleva a un rejuvenecimiento integral, y la paralización del proceso de envejecimiento durante un año. Si realizamos un Thermage anual, cada año tendremos una imagen más joven, dándose la paradoja que cada año que pasa somos más jóvenes
Después del Thermage han aparecido todas las radiofrecuencias presentes en el mercado, que aunque usando la misma radiación no han sido capaces de producir el rejuvenecimiento del Thermage.
Existen diferentes equipos que han aunado distintas energías en un mismo cuerpo y así tenemos máquinas de radiofrecuencia con vacuoterapia, o con ultrasonidos o con thermoterapia, etc., etc.
Todas son parecidas con distintas variables en su combinación aunque tengan diferentes nombres pero las energías siempre son las mismas.
